miércoles, 13 de mayo de 2020

Las Vacaciones empiezan por casa


El primer lugar del que me gustaría hablar es donde vivo: Viedma, capital de la provincia de Río Negro.

Ya les conté que nací y me crié en un pequeño pueblo de Provincia de Buenos Aires, llamado Coronel Brandsen. Su cercanía con ciudades como La Plata y Buenos Aires, hacen que todo esté al alcance de la mano, y a pesar de ser pueblo, se pueda disfrutar de las cosas que se encuentran en una gran ciudad, como los shoppings, salas de cine, teatros, parques o museos…

Así que mi vida siempre estuvo fragmentada entre ser un poco pueblerina, pero también un poco (bastante) citadina.

Cuando conocí el sur me golpeó la inmensidad… la cantidad de kilómetros que uno puede recorrer sin ver un alma, la profundidad de una noche en el mar surcada por la vía láctea, el silencio que se dobla ante el soplido del viento o el cantar de un pájaro. Fue amor a primera vista, sí, y en mi cabeza soñadora juré vivir así, pero siempre y cuando hubiera un poco de ciudad… por eso pensaba en Madryn o Trelew… pero el destino quiso que fuera Viedma y no se equivocó!

(Plazoleta del Fundador - Viedma - Foto:www.adnrionegro.com.ar)

A pesar de ser capital de provincia, es una ciudad relativamente pequeña, con todo el movimiento que la administración pública le inyecta, pero donde casi todos nos conocemos mínimamente “de nombre”.

Ciudad a orillas de un ancho río, el Rio Negro o Currú Leuvú, que nace de la confluencia de los Ríos Limay y Neuquén y desemboca apenas a 30 kms en el mar del Balneario el Cóndor. Es el curso de agua más importante de la provincia, y también de la Patagonia en cuanto a su caudal.

El río marca el límite con Buenos Aires, por lo que cruzando un puente ya cambiamos de provincia y nos adentramos en nuestra ciudad hermana de Carmen de Patagones. A Viedma y Patagones juntas les llamamos “La Comarca”, porque a pesar de ser diferentes provincias, casi que nos manejamos por las dos ciudades como si fueran una.

Como toda ciudad, si venís no podés dejar de visitar su Catedral Nuestra Señora de la Merced, el Museo Tecnológico del Agua y del Suelo o el Museo Salesiano.

Pero lo más lindo para hacer en Viedma es recorrer sus escenarios naturales.

(Costanera de Viedma - Foto: www.viedma.gov.ar)

La Costanera del río se lleva el premio mayor: hacer una caminata puente-a-puente a la noche no tiene precio, admirando las luces en lo alto de la ribera maragata y el puente ferro carretero iluminado. Además sus restaurantes y cervecerías te llamarán a cada paso para probar la gastronomía local y una gran variedad de cervezas artesanales, comer en sus carritos o tomarte un helado sentado en la fuente Pucará.

(Puente Ferro carretero - Viedma - Foto: www.adnrionegro.com.ar)

De día tiene otro encanto… el aire del río, el verde del parque y los sauces, los colores del Barco Hundido, el encanto del muelle de lanchas… y hasta podés hacer un paseo en el Catamarán Currú Leuvú que te llevará a recorrer las islas.

(Barco Hundido - Viedma - Foto: www.viedma24horas.com.ar)

Ya tomando el camino hacia la costa, tenemos el mar a tan solo 30 kms. en Balneario El Cóndor, lugar elegido por muchos turistas para pasar sus vacaciones estivales y por supuesto más por los viedmenses que tienen allí sus casas de veraneo. Pero no se termina acá… desde El Cóndor hasta el Puerto de San Antonio existe un camino “paralelo” a la Ruta 3 que viaja a la vera del mar, por una ruta de pronunciados acantilados y paisajes impactantes! El llamado CAMINO DE LA COSTA es una aventura para hacer en varios días, con carpa, tráiler, casilla o motorhome, pernoctando a orillas del mar y siendo uno con esta naturaleza árida y salvaje que envuelve el alma y nos regala postales increíbles para nuestras cámaras fotográficas o para guardar en nuestra memoria.

Pero ese será tema de otro post…

sábado, 9 de mayo de 2020

Cómo nació mi amor por los viajes


Siempre me gustó viajar, conocer lugares nuevos o recorrer más de una vez los ya visitados… de chiquita recuerdo muchas vacaciones en Mar del Plata y en Villa Carlos Paz, lugares preferidos por mis padres, y hasta una vez que íbamos a Uruguay y por falta de un papel del auto no pudimos pasar la frontera y terminamos conociendo Paraná, Entre Ríos y alojándonos en el entonces Hotel Mayorazgo, con impresionantes vistas a la vera del río y su frondosa arboleda.

(Villa Carlos Paz - Foto: www.cordobaturismo.gov.ar)

En mi mente (y tamaño) de niña, yo veía las sierras de Córdoba como grandes montañas y la verde espesura como si fuera el Amazonas! Cómo disfrutaba entonces de la naturaleza y cómo aprendí a amar la aventura!


(Traslasierra - Córdoba - Foto: www.cba.gov.ar)

A los 14 años mi mamá nos llevó a Rio de Janeiro. Ahí ponía por primera vez mi piecito fuera de la Argentina y dentro de las aguas cálidas de nuestro país hermano. Qué decir! Esas playas, la rambla de Copacabana, las paradisíacas islas de Angra dos Reis, el pan de azúcar y el Cristo Redentor, todos recuerdos inolvidables! Además tuvimos la espectacular oportunidad de asistir al festival internacional Rock in Rio y ver tocar a la banda británica YES... aún hoy guardo la entrada como recuerdo de esa memorable noche!


(Entrada Rock in Rio Festival Año 1985)

No fue hasta los 16 años que hice mi primer viaje “con amigos” podría decirse… mi mejor amiga y su hermano tenían una tía en Puerto Madryn y nos invitaron a mi hermano y a mí a pasar unos días en el hasta entonces desconocido sur de la Argentina, para estos nacidos y criados en un pequeño pueblo de provincia de Buenos Aires. Y si bien nos quedábamos en casa de su familia, solamente salir a pasear por la rambla o ir a la playa solos, era respirar esa independencia que empezábamos a buscar.


(Foto: Playa de Puerto Madryn Año 1986)

Allí buceamos por primera vez y conocí el viento y la aridez de la Patagonia que me enamorarían al punto de querer vivir allí el resto de mi vida. En ese momento, sólo una expresión de deseo que muchos años más tarde el destino convertiría en realidad.


(Foto: Buceo en Puerto Madryn Año 1986)

Volví a Madryn muchas otras veces… cuando me fui a estudiar a La Plata hice amigos nuevos con los que compartí mis viajes al sur, de mochileros, conocimos Trelew y Rawson con su queridísima y hermosísima Playa Unión, y volvimos a visitar lugares mágicos como Puerto Pirámides y Punta Pardelas.
Aún hoy, que vivo en Viedma - Río Negro, a tan solo 450 kms, sigo volviendo cada vez que puedo, a ver las ballenas en Agosto o los pingüinos de Punta Tombo.


(Foto: Ballenas en Puerto Madryn - Agosto de 2010)

 (Foto: Pingüinos en Punta Tombo - Enero 2018)

Quiso también el destino que mi hermano se fuera a vivir a Rio Gallegos, y que las visitas a esa ciudad me llevaran a conocer también Punta Arenas y Torres del Paine (Chile) y nuestro magnífico Glaciar Perito Moreno en Calafate.


(Foto: Glaciar Perito Moreno - Calafate - Argentina - Mayo de 2009)


Obvio que de la Patagonia también conocía el internacional Bariloche, al que había ido de Viaje de Egresados en 5to año, donde vi nieve por primera vez en mi vida.


(Foto: Bariloche - Viaje de Egresados 5to. Año - Agosto de 1987)


No fue hasta el año 2000 que hice mi primer viaje INTERNACIONAL en avión. Ya había viajado a Rio Gallegos en avión, pero era mi primer viaje fuera del país, ya que a Rio de Janeiro habíamos viajado unas interminables 36 horas en ómnibus!!!! Es que recién en el “uno a uno” creo que a muchos nos fue posible viajar al exterior, ya que antes de eso los paquetes eras prohibitivos!

Así fue como con mi mamá cumplimos el sueño de conocer Cuba: su pintoresca e histórica La Habana y el inigualable mar de Varadero… vacaciones soñadas! Lo hicimos, como mucha gente que viaja por primera vez, a través de una agencia de viajes y a un All Inclusive donde todo lo que había que hacer era comer, divertirse y disfrutar del sol y el mar, qué más?????


 (Foto: Por La Habana en Coco Taxi - Enero de 2000)

(Foto: Playa de Varadero - Cuba - Enero de 2000)

Después, cada vez que podía, seguía escapándome a Madryn. Volví a visitar Bariloche, a conocer Esquel y su maravilloso Parque Los Alerces, y más adelante San Martín de Los Andes, Villa La Angostura, Villa Traful y el imperdible camino de los 7 lagos!


(Foto: Camino de los 7 Lagos - Argentina - Enero de 2014)

Pero no fue hasta el año 2017 que con mi mejor amiga pudimos hacer nuestro primer viaje a Europa. Destino: GRECIA, siempre dije que lo primero que conocería al cruzar el charco sería Grecia!!! Y a partir de ese momento me atacaron unas ganas de no parar de viajar y conocer el mundo!!!!!!


(Foto: El Partenón - Atenas - Grecia - Junio de 2017)

Después de nuestra primer gran aventura juntas, en 2019 emprendimos un viaje a Nueva York del que ya les contaré en detalle... y en medio algunas escapadas nacionales (Cataratas del Iguazú, Colón - Entre Ríos, Norte Argentino: Tucuman, Salta, Jujuy, El Chaltén y otra vez Bariloche, Calafate, Villa La Angostura, Puerto Madryn...) y no tan nacionales (Islas Margarita y Coche en Venezuela, Buzios y Maragogi en Brasil, Puyehue, Osorno y Puerto Varas en Chile).


(Foto: Manhattan - New York - Marzo de 2019)

Justo cuando recién empezábamos (y con pasaje comprado para Londres) nos agarra la pandemia de COVID-19… pero no importa, armo este Blog para contarles anécdotas y datos de mis viajes realizados, pero también como una forma de seguir soñando con los destinos que vendrán! Quien sabe… tal vez les comparta itinerarios que están en la etapa de lo soñado y Uds. me ayuden a hacerlos realidad con sus consejos y comentarios.

Así que esta soy yo, me presento, soy Ileana y acá les comparto
Mis Itinerarios